El relator
de Naciones
Unidas para
los derechos
al agua
potable y al
saneamiento,
Pedro Arrojo,
hizo especial
hincapié en la
dramática
situación de
la población
civil en Gaza,
señalando que
“el corte del
agua supone un
delito de lesa
humanidad en
su categoría
de exterminio;
un arma
silenciosa,
pero
igualmente
mortal”.
En España
la gestión del
agua también
puede ser
fuente de
conflicto o de
cooperación.
Durante
décadas hemos
sido testigos
de conflictos
entre regiones
y usuarios en
torno al
reparto
cuantitativo
del agua. Sin
embargo, el
agua no es
solo un
recurso que se
aprovecha y
por el que se
compite. El
reconocimiento
del agua como
dominio
público, como
patrimonio
común, exige
la transición
hacia un
enfoque de
gestión
ecosistémica
que requiere
articular
mecanismos de
cooperación y
co-responsabilidad para la protección del buen estado de los ecosistemas
acuáticos y la
gestión del
agua en
beneficio de
todos…(continuar leyendo)
